El término de dispepsia funcional probablemente lo habrás escuchado alguna vez aunque no sepas qué significa. Si hablamos de molestias en el estómago, con dolor localizado a ese nivel, malas digestiones habituales, entre otros síntomas, puede ser que la dispepsia empieces a entenderla.
Veamos algunos aspectos fundamentales sobre una patología muy habitual en las consultas de Atención Primaria, que a veces terminan por ser valoradas en el hospital. Aunque debemos recordar que no es una patología grave, sino que es molesta, crónica y presenta fluctuaciones clínicas.
¿Cuáles son los principales síntomas de la dispepsia?
Esta enfermedad se caracteriza por:
– Saciedad precoz: las personas que la padecen suelen comentar que dejan los platos sin terminar porque al comer se sienten llenos enseguida. Les parece que se han comido una gran cantidad de comida pero realmente no han terminado la mitad de su ración habitual.
– Pesadez posprandial: significa que tras las comidas se sienten llenos y esta sensación de saciedad se mantiene varias horas.
– Hinchazón abdominal es una sensación muy habitual que incluso les impide hacer ejercicio físico o deporte, ya que sienten que se les hincha el estómago.
– Dolor o ardor en la parte superior del abdomen: con una sensación de dolor sordo a nivel del estómago.
– Son frecuentes los eructos, con expulsión de gases que son parte de la causa por la que se sienten hinchados.
– Las náuseas no son habituales pero pueden aparecer. La presencia de vómitos obliga a descartar otras causas que no sean la dispepsia.
Algunos de estos síntomas pueden relacionarse con las comidas, aunque pueden aparecer sin relación con ellas, como sucede con el dolor o los ardores.
¿Cómo puedo tratar la dispepsia?
Aunque ya se habló en otra ocasión cómo combatir la dispepsia, vamos a ver de manera resumida lo que debemos hacer para mejorar los síntomas, y lo que no debemos hacer.
Debemos procurar:
– Masticar bien los alimentos, para hacer un bolo más fácil de digerir.
– Realizar comidas más frecuentes pero de menor cantidad.
– Disminuir la ingesta de alcohol.
Bajar de peso si padece sobrepeso u obesidad es la mejor manera de tener una sintomatología más llevadera.
Lo que debemos evitar es:
– Realizar comidas copiosas.
– Fumar, además de reducir los riesgos conocidos sobre el infarto de miocardio, el ictus o el cáncer, ayuda a que la sintomatología de la dispepsia desaparezca.
– Tomar alimentos con fibra que producen mucha flatulencia como legumbres (guisantes, garbanzos, judías, habas, etc), frutos secos, verduras como la coliflor, coles de Bruselas y similares, etc..
– Consumir cafeína, cacao o chocolate, ya que empeoran el normal funcionamiento del esfínter esofágico inferior de gran importancia para el cierre adecuado del estómago y evitar el reflujo gastroesofágico.
Si tienes dudas o preguntas, puedes acudir a páginas web de confianza. Te recomiendo www.pacientessemergen.es si quieres hacer alguna consulta médica.
En definitiva, cada persona conoce los alimentos que producen molestias digestivas. Siguiendo estos sencillos consejos mejorará su calidad de vida.
Y recuerda consultar con tu médico si presentas pérdida de peso significativa, presentas vómitos continuos, sangre en las heces, disfagia o dificultad para tragar, color amarillo en la piel, o dolor intenso y continuo.